Comisión Desorganizadora de los Juegos Centroamericanos
ENTRETENIDOS CON LOS JUEGUITOS
ENTRETENIDOS CON LOS JUEGUITOS
• Las instalaciones deportivas y los Condominios del Cementerio
Freddy Pacheco León
No se tienen los ø15.000 millones para atender responsablemente el compromiso asumido ante la organización olímpica internacional, de construir una “Ciudad Deportiva” (también sin terreno) ni para la construcción y remodelación de otras instalaciones como el Gimnasio Nacional, el Parque de Béisbol, el gimnasio para judo, karate y boxeo en el Parque de La Paz, además del gimnasio para voleibol y fútbol sala cerca del Centro Comercial del Sur, más la restauración del velódromo, entre otros.
Y pocos meses faltan por lo que es prácticamente imposible que el Estado determine a tiempo, contra el criterio del M. de Hacienda, las fuentes de financiamiento y pueda así ejecutar todas las acciones que permitan recibir a los visitantes que ahora NO TIENEN DONDE HOSPEDARSE, gracias a la chambonada municipal que hizo que la Contraloría desautorizara LA VENTA DEL CEMENTERIO y la conformación del fideicomiso con el BCR.
POR OTRO LADO, al igual que al animal que camina como pato, hace cuac, tiene cuerpo de pato, nada como pato y le llaman pato, ¡pero niegan que sea un pato!, así pasa con el lugar que ha sido cementerio desde hace más de un siglo, aparece en el Plan Regulador como cementerio, entierran en él a los habitantes más pobres que urgen de un cementerio, ostenta el carácter demanial como todos los cementerios, y le llaman CEMENTERIO CALVO, ¡ahora pretenden que la Procuraduría General de la República niegue que sea un cementerio!
ASÍ, va cayendo por su peso el PRETEXTO de los jueguitos centroamericanos para proceder a vender a un precio muy subvalorado, unos 17.000 m2 del lado norte del cementerio Calvo con el cuento de que allí hay que construir, ¡aparte de un oficentro de ocho pisos!, tres torres de apartamentos para que por dos semanas sirvan de hospedaje para los 3000 nicaragüenses, salvadoreños, hondureños, y tal vez, guatemaltecos y panameños que nos visitarían en poco más de un año. Casi 300 apartamentos que esperan sean financiados por el BCR y que costarían unos ø31.000 millones de colones… sin conocerse un plan formal de venta de los mismos que garantice el éxito financiero de un gasto tan grande.
En conclusión, no se tiene el necesario fideicomiso que aportaría el dinero (pues el presupuesto municipal de ø50.000 millones ya está más que comprometido), no se ha tramitado ningún plano de construcción ante el Colegio de Ingenieros y Arquitectos, ni se ha iniciado el estudio de impacto ambiental, se necesitarían unos dos años para trámites y construcción de obras.
COMO NO SE HAN EXHUMADO LOS CADÁVERES ahí enterrados por más de 100 años, la posible imagen de media docena de retroexcavadoras sacando con sus palas mecánicas los restos humanos que fueren irrespetados, debería ser suficiente motivo para que los miembros del Concejo Municipal que irreflexivamente han accedido a los planes de tal disparate, actuaran deteniendo un mal concebido plan que tanto desprestigio les está provocando. Acción correctiva que debería ser seguida por ordenar la RESTAURACIÓN del camposanto, en vista de la muy calculada destrucción llevada a cabo en los últimos tres meses, donde después de quitar cruces y lápidas, se despedazó el jardín para luego cubrirlo con escombros provenientes de la calle 3 capitalina, para así mostrar un dizque TERRENO INCULTO que, sin embargo, funciona como cementerio, y sigue siendo tal.
Y pocos meses faltan por lo que es prácticamente imposible que el Estado determine a tiempo, contra el criterio del M. de Hacienda, las fuentes de financiamiento y pueda así ejecutar todas las acciones que permitan recibir a los visitantes que ahora NO TIENEN DONDE HOSPEDARSE, gracias a la chambonada municipal que hizo que la Contraloría desautorizara LA VENTA DEL CEMENTERIO y la conformación del fideicomiso con el BCR.
POR OTRO LADO, al igual que al animal que camina como pato, hace cuac, tiene cuerpo de pato, nada como pato y le llaman pato, ¡pero niegan que sea un pato!, así pasa con el lugar que ha sido cementerio desde hace más de un siglo, aparece en el Plan Regulador como cementerio, entierran en él a los habitantes más pobres que urgen de un cementerio, ostenta el carácter demanial como todos los cementerios, y le llaman CEMENTERIO CALVO, ¡ahora pretenden que la Procuraduría General de la República niegue que sea un cementerio!
ASÍ, va cayendo por su peso el PRETEXTO de los jueguitos centroamericanos para proceder a vender a un precio muy subvalorado, unos 17.000 m2 del lado norte del cementerio Calvo con el cuento de que allí hay que construir, ¡aparte de un oficentro de ocho pisos!, tres torres de apartamentos para que por dos semanas sirvan de hospedaje para los 3000 nicaragüenses, salvadoreños, hondureños, y tal vez, guatemaltecos y panameños que nos visitarían en poco más de un año. Casi 300 apartamentos que esperan sean financiados por el BCR y que costarían unos ø31.000 millones de colones… sin conocerse un plan formal de venta de los mismos que garantice el éxito financiero de un gasto tan grande.
En conclusión, no se tiene el necesario fideicomiso que aportaría el dinero (pues el presupuesto municipal de ø50.000 millones ya está más que comprometido), no se ha tramitado ningún plano de construcción ante el Colegio de Ingenieros y Arquitectos, ni se ha iniciado el estudio de impacto ambiental, se necesitarían unos dos años para trámites y construcción de obras.
COMO NO SE HAN EXHUMADO LOS CADÁVERES ahí enterrados por más de 100 años, la posible imagen de media docena de retroexcavadoras sacando con sus palas mecánicas los restos humanos que fueren irrespetados, debería ser suficiente motivo para que los miembros del Concejo Municipal que irreflexivamente han accedido a los planes de tal disparate, actuaran deteniendo un mal concebido plan que tanto desprestigio les está provocando. Acción correctiva que debería ser seguida por ordenar la RESTAURACIÓN del camposanto, en vista de la muy calculada destrucción llevada a cabo en los últimos tres meses, donde después de quitar cruces y lápidas, se despedazó el jardín para luego cubrirlo con escombros provenientes de la calle 3 capitalina, para así mostrar un dizque TERRENO INCULTO que, sin embargo, funciona como cementerio, y sigue siendo tal.
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